Todo lo que debes saber sobre los autos a gas.
Descubre cómo funcionan los autos a gas, qué tipo de gas utilizan y qué aspectos de seguridad deberías tener en cuenta si adquieres uno de éstos vehículos…
Al momento de adquirir un nuevo vehículo, existen algunos factores que te ayudarán a determinar cuál es la mejor opción: el tipo de uso que le darás, los costos que éste genere en combustible y repuestos, y su impacto al medio ambiente.
Una excelente alternativa entre las muchas opciones, es comprar un auto a gas. Ahora bien, ¿qué características tienen estos autos?, ¿cómo funcionan y qué ventajas tienen? y ¿son seguros?
¿Cómo funcionan?
Los autos utilizan diferentes tipos de combustible para su funcionamiento, entre los cuales se encuentra el gas. En un proceso de transformación de energía térmica a energía cinética, el gas se quema dentro de los cilindros del motor, al igual que lo hace la gasolina.
Una de las grandes ventajas en este tipo de vehículos, es que podrás utilizar gasolina o gas como combustible, de modo que, si consumes todo el gas de tu vehículo, puedes llenar el tanque con gasolina.
Los autos pueden usar GLP (gas licuado de petróleo) y GNV (gas natural vehicular). El GLP es una mezcla de gas butano y propano (viene en Bombonas) y el GNV es gas metano (que se usa en tuberías para la calefacción y el agua caliente). En ambos casos, funcionan con el mismo motor.
El GLP o el GNC (gas natural comprimido) se almacena en tanques que pueden fijarse debajo del vehículo, debajo de los asientos traseros o del maletero, y por medio de un sistema de inyección especial se conectan al motor, el cual tiene pequeñas modificaciones en las válvulas o los pistones.
¿Son diferentes a otros autos?
Aunque pueden funcionar con dos tipos de combustibles, no son tan diferentes a los autos convencionales. Incluso la boquilla para el gas se encuentra en el mismo lugar donde está la de la gasolina. El gas natural se introduce en el vehículo como cualquier otro combustible, así que repostar combustible no representara ninguna dificultad.
Una de las pocas diferencias es el tanque de gas, que podrás notar solo si se encuentra en un espacio visible. El rendimiento de un auto a gas en velocidad y potencia es similar, y en muchos casos hasta mejor, que el de uno a gasolina.
¿Son seguros?
Los tanques de almacenamiento de estos autos son fabricados de acero anticorrosivo, que soportan altas temperaturas. El gas se mantiene herméticamente en estos tanques gracias a unas electroválvulas que solo se abren al poner el contacto.
El estado de los tanques se certifica cada cierto tiempo, revisando si hay pérdida de espesor en sus paredes, corrosión, rozamiento, entre otras condiciones. Estos tanques han sido diseñados para resistir golpes, accidentes, cambios repentinos en el entorno e incendios. De manera que no existe ninguna posibilidad de que exploten.
El sistema cuenta con válvulas de seguridad que se abren en situaciones de excesivo calor dejando escapar el gas de manera constante y controlada, disipándose con facilidad pues el gas es más ligero que el aire. Así se evita acumular formaciones peligrosas como ocurre con otros combustibles líquidos.
¿Qué ventajas ofrecen?
Tener un auto a gas representa un ahorro en la economía doméstica, pues llenar un tanque de gas es mucho más económico que llenarlo de gasolina, por sus costos de producción.
Al usar un auto a gas ahorras hasta un 35 % de combustible, además de disminuir la emisión de contaminantes respecto a la gasolina y el diésel, como el dióxido y el monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno y otras partículas en suspensión.
La funcionalidad, seguridad y beneficios que ofrecen los autos a gas los convierten en una magnifica opción que debes considerar a la hora de adquirir un nuevo vehículo.